Francisco Gracia, un vecino cordobés de 67 años, ha puesto a la venta en un conocido portal de subastas de internet un capitel del siglo X perteneciente al conjunto histórico de Medina Azahara, adquirido en Christie’s hace una década.
Gracia compró el capitel en 2003 en la casa inglesa, y desembolsó por él 10.000 euros, un precio que ahora ha rebajado hasta 7.000 al ponerlo a la venta por internet, según explica en una entrevista con Efe.
Se trata de capitel de estilo corintio, esculpido en mármol y decorado con motivos florales, de la época omeya y perteneciente a Medina Azahara, la ciudad palatina que mandó construir Abderramán III, a unos ocho kilómetros de Córdoba, en la Sierra Morena.
Una de sus principales características, y quizá la más llamativa, es la forma de nido de abeja, muy común en la zona de Córdoba y en Medina Azahara. Gracia, que es un apasionado de la historia y el arte, recuerda que descubrió su capitel en un catálogo y que, movido por el interés que siente por todo lo cordobés, no dudó en comprarlo en la famosa casa de subastas inglesa.
Según su actual propietario, se trata de una pieza en perfecto estado de conservación, y de la que ahora se ha visto obligado a desprenderse por necesidades económicas. “Es una pieza de mucho valor, por lo menos a nivel personal, y muy bonita, pero ahora tengo necesidades económicas”, especifica el coleccionista. Ante esa tesitura, fue su hija la que le aconsejó que buscara una vía distinta para poner a la venta el capitel, y sugirió un conocido portal de subastas por internet. Una iniciativa que, hasta el momento, “no ha surtido efecto”, aunque “sí ha tenido mucha publicidad”, señala el vendedor.
Lo cierto es que la biblioteca en la que aún está el capitel, contiene otros tesoros, la mayoría literarios, como varios libros de siglos de antigüedad, lo que da fe de la pasión que siente Gracia por la historia, las humanidades y el arte. Son estas precisamente las tres carreras que ha estudiado Gracia -que dejó la escuela a los doce años-, ya una vez que se jubiló, y a las que en gran parte debe su conocimiento en piezas arqueológicas.
“Para adquirir este tipo de objetos, lo primero es tener conocimiento del asunto”, asegura Gracia, que, de momento, no está teniendo la misma suerte para encontrar a alguien a quien poder vender el capitel.
La puja, que inició hace dos meses, aún no ha interesado a ningún comprador a falta de apenas cinco horas para que concluya el primer plazo -una vez pasado este, se renueva automáticamente-, aunque esto suele ser frecuente, puesto que generalmente los cazadores de gangas atienden a los últimos minutos para plantear sus ofertas.
En caso de que finalmente nadie muerda el anzuelo, Gracia tiene previsto un “plan b” y acudirá a la madrileña casa de subastas Durán, pero con el precio de venta inamovible.”Lo he rebajado un 30 por ciento, y ya no lo pienso bajar más”, concluye Gracia.