Raúl de Tapia es biólogo, director de la Fundación Tormes-EB y miembro de la Red Internacional de Escritores por la Tierra (RIET). También es un colaborador habitual del programa ‘El bosque habitado’ de Radio 3 bajo el seudónimo de Raúl Alcanduerca. Una de sus últimas intervenciones en este programa radiofónico se titula ’De centenos y castaños’. Si queréis leer más intervenciones de otros autores, lo podéis hacer en la página de Facebook de ‘El bosque habitado’, aunque nosotros lo que realmente os recomendamos es que escuchéis el programa atentamente.
‘De centenos y castaños’
Huele a leña, a destello de savias de roble en tu memoria.
Suena a risas, las del Ancares, que cosquillea piedras con sus aguas.
Veo amarillos, de unas hojas que diluyen el verde hacia dorados viejos.
Saboreo un magosto, de castañas cálidas, sabrosas… Alimento a mi sentir.
Acaricio musgos, cuajados de rocío, mientras suavizan la piedra seca.
No puedo enredarme en los caminos de Pereda sin esta apertura a los estímulos.
Todos los senderos llevan a un ayer de medio siglo, a un hogar siempre hermoso.
La piedra arranca del suelo… como un tronco cerrado de hileras pizarrosas. Y el centeno desciende en cuelmos para abrigar los rostros de la palloza.
Las manos trenzaron velortos, dieron forma a unos tallos eternos de bondad infinita. Juntaron unos y otros para techar una cabaña, nutrida de familias y bestias… Despuntan las espigas, inflorescencias de pan para llevar… Rotas quedan las aristas que surgían de cada grano, de cada gluma y “malladas” hasta alcanzar los tesoros… Luego, molerlos bajo los álamos para amasar panes y sueños.
Los fríos y el hambre se doblegan con el tesón de centenos y castaños.
Las ilusiones se fertilizan en huertas y bodegas.
Todo sigue allí, en una pausa anhelante, en espera de nuevas manos. De hombres y mujeres querenciosos de topografiar sus rostros con los surcos del esfuerzo y la felicidad.
Las “morteiras” despiertan junto a los arroyos… La plácida luz tañe las campanas de la esperanza.
Raúl de Tapia