La Red de redes en Defensa de la Humanidad, un colectivo cubano que forma parte de la Red Internacional de Escritores por la Tierra (RIET), nos envía este artículo que sirve de homenaje a Nadie Gordimer, la genial escritora sudafricana que murió el pasado 13 de julio a la edad de 90 años. Sirvan estas palabras del movimiento cubano como despedida conjunta de la RIET a esta mujer irrepetible que entre otro muchos honores ganó un Premio Nobel en 1991. Descanse en paz.
‘Adiós a Nadine’
Con la muerte de Nadine Gordimer la literatura universal despide a una figura prominente, de las más luminosas y auténticas, y las causas justas de este mundo a una luchadora firme, íntegra, que echó invariablemente su suerte, como Martí, con los pobres de la tierra.
La Revolución Cubana contó siempre con el respaldo y la lealtad de Nadine, que nunca creyó en la avalancha de calumnias fabricadas día a día por la maquinaria imperial. Por eso condenó el bloqueo cruel y genocida. Por eso hizo suya la causa de los Cinco. Y, cuando se fundó la red “En defensa de la Humanidad”, ahí estuvo Nadine para sumar su
voz y su enorme prestigio al movimiento que empezaba a articularse.
Jamás se traicionó a sí misma, ni en su creación ni en su conducta. Su extraordinario talento se colocó a la par de su ejemplar altura ética. Se formó dentro de una sociedad bestial, marcada por la violencia y el racismo fascista del apartheid, y no quiso mirar hacia otro lado.
De ahí que su sensibilidad literaria y su sensibilidad social y política crecieran juntas muy tempranamente, en el amor a las palabras, a la justicia, a sus semejantes. Se convirtió así en una gran escritora y en una valerosa militante del Congreso Nacional Africano.
Obtuvo mucho más que el Premio Nobel de Literatura: la admiración y el cariño infinitos de los que pudieron apreciar, desde cualquier rincón del planeta, su valor como creadora y como ser humano.
Red de redes En defensa de la Humanidad-Cuba