Queridos amigos y amigas de la Red Internacional de Escritores por la Tierra,
Os escribo con el único fin de desearos a todos una feliz Navidad y un mejor 2017. De hecho, deseo de todo corazón que el año que entra sea mejor que el que acaba, porque menudos meses más negros estamos viviendo… Hecha la felicitación, deseadme que haga una pequeña reflexión. Este 2016 ha sido un año nefasto, con muchos frentes abiertos en países con miembros de la RIET que lo están pasando muy mal. Ahora que acaba el año es imposible no acordarse del asesinato de la pobre Berta Cáceres, y de todas las personas valientes que están siendo asesinadas en Honduras, pero también en otros países, por defender la libertad y luchar por un mundo mejor. Y qué decir de lo que está pasando en Nicaragua, de las políticas de Daniel Ortega y de la construcción del Gran Canal Interoceánico y el desastre medioambiental que va a provocar. Tampoco puedo dejar de mencionar (se me encoge el alma) que durante este año 2016 tampoco se ha hecho justicia con los 43 estudiantes asesinados de Ayotzinapa, y además este terrible caso ha perdido fuerza y ya casi nadie se acuerda de ellos…
Y ya sabéis cómo están las cosas en Estados Unidos. La última ocurrencia de Trump ha sido nombrar como máximo responsable del medio ambiente del país a una persona muy cercano a la industria de las energías fósiles y que además niega que exista el cambio climático. Vivimos en un mundo surrealista… Y aquí en Europa las cosas no están mucho mejor. El Viejo Continente y la cuna de la democracia está en manos de algunas personas que no respetan los derechos humanos, y prefieren quitarse de encima la crisis de los refugiados aceptando la creación de una especie de campos de concentración para refugiados. Quién nos ha visto y quién nos ve. Así está el mundo. Es para echarse a llorar.
Por todo ello, pese a que ahora vienen días de compartir felicidad y alegría, yo os pido que ahora más que nunca sigáis siendo revolucionarios, que ahora más que nunca en vuestras vidas sigáis luchando porque el mundo se nos está descomponiendo ante nuestros ojos y lo intentamos solucionar o pronto será demasiado tarde. Como decimos en la postal de Navidad que hemos preparado (la tenéis aquí debajo o también adjunta por si la queréis hacer llegar a vuestros contactos), “es justicia y no caridad lo que necesita el mundo”. Os animo a que penséis en esta frase y no olvidéis nunca todo lo que significa. Insisto: ahora más que nunca es cuando la Tierra necesita de la fuerza de la palabra; ahora más que nunca necesita de la fuerza de la RIET.
Hecha la reflexión, os deseo una Navidad mucho más sostenible y un año 2017 más solidario y ecológico.
Un fuerte abrazo para todos
PD: Y, por supuesto, recordadlo siempre: QUE NADIE OS ROBE VUESTRA SONRISA
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Ángel Juárez Almendros. Presidente de la Red Internacional de Escritores por la Tierra
