Ángel Juárez Almendros (1955), el popular presidente de Mare Terra Fundació Mediterrània y la Red Internacional de Escritores por la Tierra, lanza su sexto libro al mercado. Se titula ‘Las crisis de la crisis’ y es una recopilación de 59 artículos y 25 poesías con un nexo en común: las crisis que nos rodean. Juárez presentará su nuevo libro este jueves 6 de octubre a las 19:30 horas en la Casa Canals de Tarragona.
-¿Cómo nace el proyecto de hacer un libro recopilando artículos y poesías sobre la crisis?
El proyecto surge porque parecía que la crisis no iba a durar demasiado tiempo, y al final hemos visto que incluso en eso nos han engañado. Casi diez años después todavía hay crisis, y eso ha tenido muchas consecuencias. Y claro, alguien tiene que explicarlas. Pensamos que yo, que escribo artículos sobre la crisis desde hace ocho años, podía aportar una visión interesante sobre todo lo que pasaba a mi alrededor relacionado con la crisis económica. Y así nació ‘Las crisis de la crisis’.
-Una de las tesis del libro es que de la crisis económica han emergido otras.
Sí, es evidente. Por ejemplo, muchas veces cuando miras los medios de comunicación comienzas a escuchar palabras desconocidas para la mayoría de la población: prima de riesgo, IBEX, fluctuación bursátil… Lo que quieren es que la población crea que la crisis es sólo económica, cuando en realidad hay muchas otras. Pero lo quieren esconder. Y este es uno de los objetivos del libro: explicar con palabras que todo el mundo pueda entender qué es lo que está ocurriendo exactamente.
-Entre el primer artículo del libro y el último transcurre un periodo de ocho años. ¿Qué ha cambiado en todo este tiempo?
Las personas se han ido adaptando a la crisis, pero no nos engañemos: hay colas en las consultas de los psicólogos. Algunas cosas han cambiado y otras no. Por ejemplo, la bolsa de pobreza ha aumentado un 30% mientras se reducía la clase media. Pero hay otros aspectos que no han evolucionado en ocho años, como la angustia, el sufrimiento y el dolor que viven miles de personas. Cuando el lector lea los primeros artículos del libro, del 2008, y los compare con los últimos, del 2016, se dará cuenta de que en realidad todo continúa más o menos de la misma manera.
-Desde hace un tiempo se escucha que la crisis está llegando a su fin. ¿Usted se lo cree?
Es mentira. Una gran mentira. Como decía ahora, se trata de un tema de adaptación. Nos han querido hacer creer que un 20% de paro o que los jóvenes no puedan marcharse de casa de sus padres son cosas normales, cuando no lo son. Aquí hay que reconocer que los artífices de la crisis han hecho un trabajo excelente, puesto que han dejado la sociedad que ellos querían. La realidad es que la crisis no se acabará hasta que los poderes fácticos lo deseen.
-Al final, el mensaje de su libro… ¿es optimista o pesimista?
Yo escribo las cosas como las veo y como las siento. Pero reconozco que siempre, en todos mis artículos, acabo dando un mensaje de optimismo y de resistencia. No puedo evitarlo, pues va con mi carácter.
-¿Por qué decidió incluir poesías en ‘Las crisis de la crisis? ¿Qué cree que aportan?
Mediante la poesía, la palabra, la literatura y la cultura también se puede hacer una revolución. Estoy convencido de que un discurso, con las palabras bien escogidas, puede ser tan poderoso como mil tanques. Yo creo en la poesía con compromiso, en la poesía que lucha contra la indefensión. Como digo en mi poema ‘Cuando’, “cuando se legaliza la injusticia, la resistencia es un deber y denunciarla una obligación”. Y es por este motivo que las poesías eran necesarias en el libro.
-Y acabamos. ¿Cree que todavía le quedan artículos por escribir sobre la crisis?
Desgraciadamente, es así. Ojalá pudiese hablar sobre otras cuestiones que también me encantan en mis artículos, pero mientras vea sufrimiento e injusticias a mi alrededor, seguiré denunciándolas empuñando mi pluma.