La FISC, ayer martes 11, ha sido informada de nuevos enfrentamientos e invasión a otros poblados del Norte de Kivu por parte de tropas rebeldes comandadas por Nkunda.
La ciudad de Kasando ha sido invadida y miles de personas huyen caminando a la selva. Las comunicaciones vienen siendo destruidas.
Según comunicación directa con religiosas de Compañía de María la invasión ha llegado hasta Kasando. La población ha huido y se refugia en la selva. Hay largas horas de camino a pie y todos van con mucho miedo.
También se reporta que los invasores han destruido una torre de comunicación, imposibilitando las comunicaciones vía teléfono.
La huida de la población es dramática ya que han abandonado sus viviendas, sus pertenencias y sus vidas corren peligro.
Las religiosas de la Compañía de María también han abandonado Kasando y ahora se refugian con la población.
La Fundación Internacional de Solidaridad Compañía de María tiene establecido en la zona varios proyectos de cooperación: Una maternidad, un colegio de primaria y secundaria, talleres de formación para jóvenes, centros sociales. Todo la infraestructura de este trabajo esta en peligro de ser saqueada. Aunque en estos momentos lo que realmente nos preocupa es el GENOCIDIO que viene ocurriendo.
Mayor información: www.fisc-ongd.org y http://www.umoya.org/
Estas palabras escritas a contrareloj por un compañero periodista de Tarragona, Marco Antonio Flores, reflejan la situación desesperada que se está viendo en El Congo y requieren respuesta por parte de la sociedad. Os instamos a enviar las siguientes cartas solicitando una intervención inminente que frene el genocidio en este país:
CARTA 1:
D. Juan Antonio YÁÑEZ-BARNUEVO
Embajador Representante Permanente
MISIÓN PERMANENTE DE ESPAÑA ANTE NACIONES UNIDAS
Fax: (212) 949 7247
http://www.spainun.org/pages/directorio.cfm
Nos dirigimos a usted para expresar nuestra extrema preocupación por la alarmante escalada de violencia en la República Democrática del Congo (RDC) , país que como sabe vive uno de los conflictos más sangrientos de las últimas décadas con más de 5 millones de muertos por razones asociadas al conflicto desde el año 1998 – mayoría niños y civiles - y más de 1.6 millones de desplazados. El avance de los grupos rebeldes armados ha provocado 200.000 nuevos desplazados desde el mes de agosto y nuevos crímenes contra la población civil. Esta situación muestra la parálisis que sufren los acuerdos firmados el pasado enero del 2008 a favor del proceso de paz, incluidos los compromisos de la comunidad internacional .
La escalada del conflicto constata una vez más la inoperancia de las Misión de Naciones Unidas para Congo (MONUC) – que viene actuando desde el año 2.000 con más de 17.000 efectivos (la mayor misión de paz de la ONU en el mundo)- ; para cumplir su mandato de protección a la población civil y supervisión de la implantación del alto al fuego en el país . Muestra de ello ha sido la reciente dimisión del comandante en jefe de las tropas de Naciones Unidas, el español Vicente Díaz de Villegas , a los dos meses escasos de asumir su cargo.
La MONUC viene siendo acusada por la población civil y por numerosas organizaciones de derechos humanos y de cooperación ; no sólo por el incumplimiento de su mandato sino también por supuesta implicación en la muerte de civiles y desplazamientos de la población a raíz de operativos conjuntos con las fuerzas armadas congoleñas.
Las denuncias relacionan a los diferentes actores implicados en el conflicto con los intereses económicos de las multinacionales europeas y estadounidenses por la apropiación y control de los ingentes recursos minerales que tiene el país (coltán , oro, diamantes, cobre, cobalto, uranio, estaño..), así como el tráfico de armas. En ese sentido, cumbres internacionales como la realizada el pasado día 7 de noviembre en Nairobi para encontrar una salida permanente al conflicto de la RDC; sumarán un nuevo fracaso mientras no traten con prioridad la relación entre la explotación de recursos naturales y su vínculo con la violación de derechos humanos .
Por todo ello , instamos a sus funciones para :
- Que se tomen las medidas necesarias para que la comunidad internacional cumpla con sus obligaciones respecto al derecho internacional humanitario y los derechos humanos. Para ello solicitamos todos los esfuerzos y el apoyo para atender a la población desplazada de forma inmediata y reactivar el proceso de paz; tratando con prioridad la restitución de la soberanía de la nación y pueblo congoleño sobre la gestión y control de sus recursos naturales, conforme establecido por los principios del derecho internacional.
- La responsabilidad española ejercida al asumir el mando de las tropas de la MONUC en septiembre pasado, con la designación del general Vicente Díaz de Villegas, no puede acabar con el anuncio de su dimisión . Por ello , solicitamos la creación de una comisión de investigación inmediata e independiente por parte de Naciones Unidas sobre la actuación de la MONUC, en relación a la supuesta relación de sus operaciones con la muerte de civiles y desplazamientos de la población.
Esperamos conocer su respuesta a nuestras demandas, confiando en el papel comprometido de nuestro gobierno y sus representantes en la promoción de la paz y en la defensa de los derechos humanos.
Atentamente,
CARTA 2.
Sr.D. José Luis Rodríguez Zapatero
Presidente del Gobierno
Sr. D. Miguel Ángel Moratinos
Ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación
Sra.Dña. Carme Chacón
Ministra de Defensa
Sr. D. Angel Lossada
Secretario de Estado de Asuntos Exteriores
Sra. Dña Carmen de la Peña Corcuera
Directora General de Política Exterior para África
Nos dirigimos a ustedes para expresar nuestra extrema preocupación por la alarmante escalada de violencia en la República Democrática del Congo (RDC) , país que como saben vive uno de los conflictos más sangrientos de las últimas décadas con más de 5 millones de muertos por razones asociadas al conflicto desde el año 1998 – la mayoría niños y civiles- y más de 1.6 millones de desplazados. El avance de los grupos rebeldes armados ha provocado 220.000 nuevos desplazados desde el mes de agosto y nuevos crímenes contra la población civil. Esta situación muestra la parálisis que sufren los acuerdos firmados el pasado enero del 2008 a favor del proceso de paz, incluidos los compromisos de la comunidad internacional .
La escalada del conflicto constata una vez más la inoperancia de las Misión de Naciones Unidas para Congo (MONUC) – que viene actuando desde el año 2.000 con más de 17.000 efectivos (la mayor misión de paz de la ONU en el mundo)-; para cumplir su mandato de protección a la población civil y supervisión de la implantación del alto al fuego en el país . Muestra de ello ha sido la reciente dimisión del comandante en jefe de las tropas de Naciones Unidas, el español Vicente Díaz de Villegas , a los dos meses escasos de asumir su cargo.
La MONUC viene siendo acusada por la población civil y por numerosas organizaciones de derechos humanos y de cooperación ; no sólo por el incumplimiento de su mandato sino también por supuesta implicación en la muerte de civiles y desplazamientos de la población a raíz de operativos conjuntos con las fuerzas armadas congoleñas.
Las denuncias relacionan a los diferentes actores implicados en el conflicto con los intereses económicos de las multinacionales europeas y estadounidenses por la apropiación y control de los ingentes recursos minerales que tiene el país (coltán , oro, diamantes, cobre, cobalto, uranio, estaño..), así como el tráfico de armas. En ese sentido, cumbres internacionales como la realizada el pasado día 7 de noviembre en Nairobi para encontrar una salida permanente al conflicto de la RDC; sumarán un nuevo fracaso mientras no traten con prioridad la relación entre la explotación de recursos naturales y su vínculo con la violación de derechos humanos .
Por todo ello , instamos al gobierno español :
- A tomar las medidas necesarias para que la comunidad internacional cumpla con sus obligaciones respecto al derecho internacional humanitario y los derechos humanos. Para ello solicitamos todos los esfuerzos diplomáticos y el apoyo para atender a la población desplazada de forma inmediata y reactivar el proceso de paz; tratando con prioridad la restitución de la soberanía de la nación y pueblo congoleño sobre la gestión y control de sus recursos naturales, conforme establecido por los principios del derecho internacional.
- La responsabilidad española ejercida al asumir el mando de las tropas de la MONUC en septiembre pasado, con la designación del general Vicente Díaz de Villegas, no puede acabar con el anuncio de su dimisión . Por ello , solicitamos la creación de una comisión de investigación inmediata e independiente sobre la actuación de la MONUC, en relación a la supuesta relación de sus operaciones con la muerte de civiles y desplazamientos de la población.
Esperamos conocer su respuesta a nuestras demandas, confiando en el papel comprometido de nuestro gobierno en la promoción de la paz y en la defensa de los derechos humanos.
Atentamente,
Podéis remitir estas cartas a través de:
quideuaqui@moviments.net
María García : 93 302 68 82
Algunas claves para entender este conflicto en la siguiente entrevista:
