Guillermo Bown es un prestigioso escritor, profesor des Sociología, periodista, diplomático y miembro de la Red Internacional de Escritores por la Tierra (RIET). Como hoy es viernes, hemos decidido darnos un gustazo y recuperar uno de sus poemas, titulado ‘Los poetas con Roque’, que tiene una particularidad muy especial: en él aparecen nombrados varios miembros de la RIET. Guillermo Bown leyó este poema durante un recital poético dedicado a Roque Dalton (poeta y revolucionario salvadoreño que fue asesinado) en el Museo Tecleño, que antes fue una cárcel para presos políticos.
‘Los poetas con Roque’
Después del canto de las lluvias
cuando la tormenta asesina
cayó en un solo trueno en tu vida
llegaron junto con el arcoiris
todos los poetas del universo.
Del sur subió a renacer contigo
el vate Neruda en una ola marina
Nicanor bajó del Olimpo a tu frente
Huidobro y Gabriela
trajeron flores de poemas
cantos y rondas de niños
mientras tu amigo Lihn
brindaba la rosada cepa
recordando tantas uvas
y racimos de fraternidad
en la calle Bandera en Plaza Italia
con Roque de Clandestino
con Regis Debray y los sueños
en la Escuela de Derecho
en Chile tu otra patria
en el bar mas familiar.
Esa tarde cálida de mayo
Vallejos y Cortázar prendieron
los fuegos y todas las llamas
amando el Dios de Rilke y
saboreando las sopas sociales
de Galeano, Benedetti y de Mello.
Con el tam tam de la verdad
contra la mentira y la maldad
los tambores de Gelman, Guillen y Mir
temblaron la consciencia americana
cuando Asturias nos pintaba lo natal
entre criollos e indígenas
y Otto René con Cardenal
con salmos, pan y espadas
de justicia y dulce humanidad
trajeron luceros de bien y bondad.
Todos en la fiesta universal de Roque
con Martí, Darío y Paz
en el carro celeste llegado de Méjico
Honduras, España, Nicaragua
Cuba, Chile, Bolivia y Brasil
celebrando al inmortal
en la cristal taberna de Praga
en la musical Viena de Kresiky
en el Viejo Mundo donde beben
Blake y Hordeling negra cerveza
brindando por una rosada anarquía
en la posada donde Rimbau rebelde
saborea un guiso triste con Leopardi
mientras las hojas de hierba de Whitman
caen sobre las aguas del río Lempa.
Y han llegado Kasanzakis con Hikmet
a probar las doradas pupusas
a saludar al valiente Roque
y a cantar y bailar un torito pinto
con luceros y guirnaldas celestes
todo el pueblo con su poesía.
Los poetas defensores de la tierra
traen loas del bien y el mar
vienen Fonseca junto a Juárez
Valls Calgada con Bown
y del brazo noble de Homero
vienen bajando a la fiesta del bien
Marisol, Casaus, Rivas, Mayra
Giovanna, Melgar, Elena y Mendoza,
mientras se escuchan son de viejos
y saltan al compás de un barreño
los nobles juglares con Camilo
el Che, Roque, y el encanto.
Se abre el infinito con sus gemas
los planetas abrazan a la madre tierra
y reencantados de la danza y el verso
todos los astros en un embeleso
en la carroza de azul galaxia
viene Roque del espacio divino
para quedarse con nosotros
para siempre toda la vida
en la gloria de la eternidad.
Guillermo Bown